¿Sabías que los residentes de Estados Unidos botamos más comida que plástico, papel, metal y vidrio? Más de 34.7 millones de toneladas de comida al año, según publicó esta semana el Washington Post. No solo es absurdo con la hambruna que existe en el mundo, sino que tiene un serio impacto ambiental y hasta económico, debido al dinero que se invierte para lidiar con el problema.
Cada uno de nosotros podemos hacer mucho para ayudar a resolver el problema. El esfuerzo que pongamos cada semana para prevenir el desperdicio de comida contribuye directamente a mejorar esta triste realidad, además de ayudarnos a mejorar nuestro presupuesto y planificar sabiamente nuestra dieta familiar.
En un post anterior Ese pedacito de cebolla todavía sirve, les habíamos compartido unos tips sobre cómo reciclar comida y revivir creativamente los leftovers. Hoy, con motivo de la noticia, nos inspiramos a prepararles unos tips facilitos que nos han resultado muy útiles a la hora de administrar mejor los alimentos de la nevera y la alacena. A continuación le pasamos nuestra receta contra el desperdicio. A ver qué les parece.
1. Prepara tu lista de recetas para la semana. Prepara una lista básica que puedas alterar cada semana, según los antojos o los ingredientes del mercado. Considera los ingredientes que necesitas y piensa si los puedes substituir por algo que ya tienes en casa.
2. Antes de visitar el mercado, visita tu nevera. No le dejes todo a tu pobre memoria. Revisa bien tu nevera y alacena antes de comprar otro paquete de cebollas u otra caja de arroz.
3. Ponte creativo con tus ingredientes. Si se te antojan unas habichuelas coloradas (frijoles) y no tienes arroz, ¿por qué no preparas un sopón de habichuelas o una ensalada de legumbres? No tienes que comprar arroz necesariamente. Igualmente, si tienes una lata de alcachofas en la alacena hacen 6 meses, ¿por qué mejor no inventarse algo?
4. Evita las ofertas y compras impulsivas. Nabol y yo nos volvemos locos en el supermercado y entendemos perfectamente si también quieres comprar todo lo que se ve rico. Pero tenemos que ser prácticos… ¡Y fuertes! Agarremos solo lo que está en la lista o lo que humanamente piensas que puedes consumir esa semana. Si se te antoja mucho el rhubarb que no estaba en la lista, llévatelo substituyéndolo por otra cosa.
5. Considera a quienes puedes alimentar con tus creaciones. Si hay algún evento especial en la oficina o tienes visita, aprovecha para preparar antojitos especiales que de otra manera no podrías consumir solo. También considera donar algunas de tus recetas a una persona de edad avanzada que viva sola o a un amigo enfermo. En Verdelicias, cuando estamos en temporada de recipe testing, muchos salen beneficiados.
6. Dona o regala alimentos antes de que expiren. Si no se te antoja el arroz integral que compraste o si te regalaron mil latas de salsas de tomates, existen organizaciones como tu Food Bank local a las que puedes donarles tus ingredientes antes de que expiren.
7. Mantén una lista de tus desperdicios con precios aproximados. Calcula todos los alimentos que desperdicias a la semana. Esto te ayudará a cobrar consciencia y te dará una mejor idea de qué comprar.
8. #SaveItSunday. A la bloguera de The frugal Girl le dio tanta vergüenza los alimentos que estaba desperdiciando que creó un hashtag buenísimo #SaveItSunday para rescatar esos ingredientes. No es mala idea sacar un día a la semana con el propósito de reusar alimentos en recetas deliciosas.
9. Come tus alimentos en orden de expiración. Reorganiza las recetas de la semana según la frescura de tus alimentos para que puedas aprovecharlo todo.
10. Infórmate sobre Eat By Date y la expiración real de tus alimentos. Muchas veces los tomates o el queso parecen perder su frescura, pero existen formas de transformar alimentos que se están acercando a su fecha de expiración. Visita el website de Eat by Date para obtener tips que te ayudarán a rescatar ciertos alimentos.
11. Come y reúsa lo que te sobra. Esto es básico. Llévate lo que te sobra de almuerzo y recicla y inventa con tus leftovers. Conviértelo en un reto delicioso y verás lo mucho que ahorras. Recuerda que hasta los trocitos de cebolla que te sobran sirven para preparar un rico caldo.
12. Congela o preserva tus frutas, verduras e ingredientes. ¿Sabías que el pan lo puedes congelar por varios meses? Los vegetales y las frutas también se conservan por mucho tiempo en el congelador. Úsalo a tu favor. Igualmente, puedes crear mermeladas o conservas de vegetales que te duran por largo tiempo.
Receta contra el desperdicio de comida en casa
1. Prepara tu lista de recetas para la semana. Prepara una lista básica que puedas alterar cada semana, según los antojos o los ingredientes del mercado. Considera los ingredientes que necesitas y piensa si los puedes substituir por algo que ya tienes en casa.
2. Antes de visitar el mercado, visita tu nevera. No le dejes todo a tu pobre memoria. Revisa bien tu nevera y alacena antes de comprar otro paquete de cebollas u otra caja de arroz.
3. Ponte creativo con tus ingredientes. Si se te antojan unas habichuelas coloradas (frijoles) y no tienes arroz, ¿por qué no preparas un sopón de habichuelas o una ensalada de legumbres? No tienes que comprar arroz necesariamente. Igualmente, si tienes una lata de alcachofas en la alacena hacen 6 meses, ¿por qué mejor no inventarse algo?
4. Evita las ofertas y compras impulsivas. Nabol y yo nos volvemos locos en el supermercado y entendemos perfectamente si también quieres comprar todo lo que se ve rico. Pero tenemos que ser prácticos… ¡Y fuertes! Agarremos solo lo que está en la lista o lo que humanamente piensas que puedes consumir esa semana. Si se te antoja mucho el rhubarb que no estaba en la lista, llévatelo substituyéndolo por otra cosa.
5. Considera a quienes puedes alimentar con tus creaciones. Si hay algún evento especial en la oficina o tienes visita, aprovecha para preparar antojitos especiales que de otra manera no podrías consumir solo. También considera donar algunas de tus recetas a una persona de edad avanzada que viva sola o a un amigo enfermo. En Verdelicias, cuando estamos en temporada de recipe testing, muchos salen beneficiados.
6. Dona o regala alimentos antes de que expiren. Si no se te antoja el arroz integral que compraste o si te regalaron mil latas de salsas de tomates, existen organizaciones como tu Food Bank local a las que puedes donarles tus ingredientes antes de que expiren.
7. Mantén una lista de tus desperdicios con precios aproximados. Calcula todos los alimentos que desperdicias a la semana. Esto te ayudará a cobrar consciencia y te dará una mejor idea de qué comprar.
8. #SaveItSunday. A la bloguera de The frugal Girl le dio tanta vergüenza los alimentos que estaba desperdiciando que creó un hashtag buenísimo #SaveItSunday para rescatar esos ingredientes. No es mala idea sacar un día a la semana con el propósito de reusar alimentos en recetas deliciosas.
9. Come tus alimentos en orden de expiración. Reorganiza las recetas de la semana según la frescura de tus alimentos para que puedas aprovecharlo todo.
10. Infórmate sobre Eat By Date y la expiración real de tus alimentos. Muchas veces los tomates o el queso parecen perder su frescura, pero existen formas de transformar alimentos que se están acercando a su fecha de expiración. Visita el website de Eat by Date para obtener tips que te ayudarán a rescatar ciertos alimentos.
11. Come y reúsa lo que te sobra. Esto es básico. Llévate lo que te sobra de almuerzo y recicla y inventa con tus leftovers. Conviértelo en un reto delicioso y verás lo mucho que ahorras. Recuerda que hasta los trocitos de cebolla que te sobran sirven para preparar un rico caldo.
12. Congela o preserva tus frutas, verduras e ingredientes. ¿Sabías que el pan lo puedes congelar por varios meses? Los vegetales y las frutas también se conservan por mucho tiempo en el congelador. Úsalo a tu favor. Igualmente, puedes crear mermeladas o conservas de vegetales que te duran por largo tiempo.
13. Almacena tus ingredientes correctamente. Si colocas tus vegetales en la nevera, cúbrelos o colócalos sobre un papel toalla para absorber el exceso de humedad. Asegúrate también que la temperatura de la nevera sea apropiada. Igualmente con los productos que coloques en la alacena. Tus productos siempre deben estar a temperatura fresca, a menos que se especifique lo contrario en la envoltura. Ten cuidado al colocar alimentos sobre la nevera o cerca de la estufa, ya que pueden dañarse más rápido.
14. No comas demás. Calcula lo que comes. Antes de comer demás por no dejar echar a perder la comida, lo mejor es guardarlo para el almuerzo al día siguiente, reutilizarlo en otra receta o anotar el exceso para cocinar o comprar menos la próxima vez.
15. Como último recurso, crea tu propia composta. Muchos de los alimentos que consumes pueden convertirse en composta después de alcanzar su fecha de expiración. La lechuga, el tomate, las cáscaras de la fruta y hasta la piel de la cebolla puede reutilizarse de esta manera.
14. No comas demás. Calcula lo que comes. Antes de comer demás por no dejar echar a perder la comida, lo mejor es guardarlo para el almuerzo al día siguiente, reutilizarlo en otra receta o anotar el exceso para cocinar o comprar menos la próxima vez.
15. Como último recurso, crea tu propia composta. Muchos de los alimentos que consumes pueden convertirse en composta después de alcanzar su fecha de expiración. La lechuga, el tomate, las cáscaras de la fruta y hasta la piel de la cebolla puede reutilizarse de esta manera.
No comments:
Post a Comment